Ya somos más de 7 billones de personas en el mundo. Todos buscando los mejores puestos, la mejor reputación, las mejores referencias, la mejor imagen y el mejor estilo de vida posible. Sin embargo, he visto que existe una sola característica que separa a los que lo consiguen y a los que no. Un simple hábito que diferencia a los extraordinarios de la multitud y rápidamente son ejemplos o líderes en su comunidad. Qué está haciendo este 1% y por qué sobresalen?
Una sola característica.
Iniciativa. Este es el factor más común que he encontrado en los sobresalientes. Es difícil encontrar a alguien que dé «el paso extra» en sus tareas o actividades diarias. Esto aplica para todos los campos: en el trabajo, en la familia o amigos, en la comunidad, en el colegio o universidad, etc. Los que tienen iniciativa se destacan por hacer más de lo que les piden, proponen nuevas ideas, lideran una actividad, sorprenden, y toman el control.
Un solo habito, miles de oportunidades.
Seguro cada uno identifica rápidamente este tipo de personas en cada aspecto de su vida:
Trabajo:
El que está un paso adelante de los demás. Piensa el siguiente movimiento de forma anticipada. Desafía las órdenes y costumbres y presenta algo adicional. Sorprende a los clientes y compañeros.
Familia y amigos:
Lidera un paseo o una fiesta. Ofrece ayuda de manera inesperada. Dirige y organiza los deberes.
Comunidad:
Mejora lo existente. Propone y ejecuta ideas para el bien de todos.
Académico:
Propone nuevas ideas para el colegio o universidad. Aplica lo aprendido por fuera de clases. Se sale del pénsum académico.
Para qué hacerlo?
Esta simple práctica trae infinitos beneficios: diferenciadores en la hoja de vida, referenciamiento de personas, recordación, liderazgo, pero lo más importante, una nueva forma de pensar. Como sólo pocas personas lo hacen, los extraordinarios dejan de ser un «commodity» y son altamente solicitados. Además, se siente bien saber que se «dejó todo en la cancha» y se evitó ser conformista o mediocre.
Muchos piensan que tener iniciativa es simplemente dejar una buena imagen por interés propio (muchos lo llaman «lambón»). En cambio, se trata de generar valor de manera inesperada y personalizada. Hacerlo puede tomar más tiempo y aumentar la dificultad de cada tarea? Sí. Pero una vez se obtenga una mentalidad de siempre dar más de lo que se espera, cada iniciativa será más fácil de planear y ejecutar. Y ustedes, van a seguir el paso o estar uno adelante?