Realmente Quieres Recibir Opiniones?

Cuántas veces hemos acudido a una opinión y terminamos en contra de aquella persona por que no era lo que queríamos oír? Es fácil decirlo, pero al solicitar una opinión o sugerencia, debemos estar abiertos a la posibilidad de que nos contradigan. El gran reto es oír atentamente y no mal interpretar.

Una sugerencia no significa que la debamos seguir!

Si hiciéramos todo lo que nos sugieren tanto en lo personal como laboral estaríamos enloquecidos. Muchos buscan opiniones de otros para confirmar que su decisión es la correcta. Podemos consultar a más de una persona y analizar si hay un patrón de respuestas similares. Al final, la decisión la tomamos nosotros.

Cómo sacar el mayor provecho de las opiniones?

Es muy fácil criticar u opinar desde un tercer punto de vista. Después de oír a la persona, recomiendo hacernos las siguientes preguntas:

• Esta persona ya ha tenido que tomar mi tipo de decisión en el pasado?
• Qué creo que pasaría en el siguiente mes o año si sigo su opinión?
• En caso de no haber sido la mejor decisión, cómo puedo corregirlo?

El peor escenario.

Si no somos buenos recibiendo opiniones, llegaremos a una etapa donde nuestros consultores no estarán dispuestos a hablarnos. O peor aún, nos dirán lo que nosotros queremos oír. Los mejores consultores son aquellos amigos o familiares que siempre dirán sus respuestas más honestas, aún si lastiman nuestros sentimientos. Estos son invaluables, no los pierdan.

Para terminar, en el trabajo y vida personal es importante oír otros puntos de vista. Muchos nos dirán su cruda y fría respuesta pero por lo menos es honesta. Estas son las personas que realmente valen la pena conservar para futuras ocasiones. Dejemos la actitud defensiva en cada consulta y volvámonos los mejores receptores posibles. De nuevo, la decisión será nuestra.